La escala en Ceuta de la flota de guerra rusa, en manos de Exteriores
La OTAN ha mostrado su malestar por la posoble participación de los buques rusos en los bombardeos de Alepo. La decisión depende de España porque Ceuta y Melilla están al margen de la protección de la Alianza
La decisión está en manos del Ministerio de Asuntos Exteriores. La solicitud de Rusia para que su flota de guerra haga escala en Ceuta depende del departamento que dirige José Manuel García-Margallo, que está reconsiderando su primer visto bueno después de que la OTAN haya mostrado su malestar por la posoble participación de los buques rusos en los bombardeos de Alepo.
Exteriores es el encargado de conceder los permisos para las escalas de buques extranjeros en puertos españoles desde hace años. Estas concesiones se realizan con total transparencia, según las características del buque y atendiendo a criterios de seguridad de la población, han destacado desde el ministerio.
"Nos preocupa que la flota, que incluye un portaviones, sea empleada como una plataforma para reforzar las operaciones militares contra civiles en Alepo", ha asegurado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. No obstante, la decisión no está en manos de la Alianza Atlántica. En este caso, Ceuta y Melilla se encuentran al margen de la protección de la OTAN ya que no están incluidas en sus tratados de la Alianza Atlántica, por lo que no se estaría violando ningún acuerdo entre los Estados miembros.
Ante la polémica surgida por la escala que tienen previsto hacer los buques rusos en Ceuta, Exteriores ha precisado que "las últimas escalas solicitadas por las autoridades rusas se están revisando en función de la información que estamos recibiendo de nuestros aliados y de las propias autoridades rusas".
Mientras Exteriores sopesa la decisión, patrulleros de la Armada y otras unidades del Ejército de Tierra y Ejército del Aire realizan el seguimiento cercano de una flota de buques de guerra rusos a su paso por espacios marítimos de responsabilidad española en dirección a Siria. En su seguimiento por las costas españolas están implicados el patrullero de Altura Cazadora, y otras unidades, del Ejército de Tierra y Ejército del Aire, como aeronaves y estaciones de vigilancia en tierra, según ha informado el Estado Mayor de la Defensa.
La flota de guerra rusa -integrada por el portaaeronaves nuclear Admiral Kuznestov, un crucero con propulsión nuclear, el Piotr Veliki y varios escoltas como fragatas y patrulleros- partió del puerto ruso de Severomorsk, cruzó el Canal de la Mancha y bordeó Francia y España.