"En España a los ricos les gusta seguir siendo ricos y seguir robando"

-Parece como si los nuevos capítulos de 'Mar de plástico' fueran de la primera temporada...

-Desde luego más de lo mismo no es, pero sí mantenemos el mismo nivel de calidad, tanto de guiones, como parte técnica, decorados y exteriores, y la historia sigue.

-¿Juan Rueda es tan malo como dicen?

-Lo de su hijo le ha granjeado muchos enemigos nuevos en el pueblo y tiene que salir del agujero en el que está metido. En los colores hay graduaciones de maldad, y Juan Rueda no es el peor, es una persona desagradable, un déspota, un nuevo rico, y ya sabemos que en este país que a los ricos les gusta seguir siendo ricos y seguir robando.

-¿Está conforme con el nivel de protagonismo de su personaje?

-El personaje sigue estando en el mismo nivel de protagonismo. Hay tramas diferentes, que se cruzan y Juan Rueda entra en nuevos negocios de mala índole, ilegales, para poder sacar adelante su empresa. 

-¿Vio muy claro desde el principio que habría segunda temporada?

-Siempre depende del éxito de audiencia, pero el planteamiento era desde el principio hacerla. Se esperó al final, para comprobar que la primera funcionaba bien, y de ahí que se tardara en anunciar la otra.

-¿Y uno empieza ya la segunda pensando en la tercera?

-No lo sé, es difícil seguir sacando crímenes en Campoamargo, porque más que esta localidad parecería Puerto Hurraco.

-Algunos dicen que las series españolas se 'estiran' mucho...

-Bueno, esto no deja de ser un negocio, una industria próspera y que da dinero, y siempre que se pueda aprovechar el tirón es bueno tanto para las empresas como para los actores, que haya trabajo. Series como ésta o 'Isabel', tienen una vida corta, que no se pueden eternizar.

-¿Ve realmente tan próspera la industria de la ficción televisiva?

-Nuestra profesión siempre está en crisis y hay un elevado nivel de paro entre los actores. Debería haber más producciones y, sobre todo, estar más repartido el trabajo, que no siempre lo hiciéramos los mismos o que hubiera posibilidad de que más actores entraran a trabajar. 

-¿Por qué cree que son siempre los mismos?

-En un principio se buscan actores que garanticen a las productoras un seguimiento fiel de la audiencia. Hubo una época en la que los actores que hacíamos televisión no estábamos muy bien vistos por el cine, y ahora se ha volcado la balanza hacia otro lado, porque los de TV llaman mucho la atención del público de las salas.

-¿Cómo ve un veterano como usted a las nuevas hornadas?

-Hay de todo, buenos actores jóvenes pero yo echo de menos una formación más concreta de teatro, más sólida, porque la TV al final enseña sólo a seguir haciendo TV. A interpretar lo que te lo enseña es el teatro.

-¿Por eso es por lo que algún político dice que los actores españoles son malos?

-Yo creo que siempre hemos sido una profesión mal vista por parte de los políticos, y eso es una pena porque no deja de ser una profesión que abandera la cultura. En este país eso no se ha respetado nunca y creo que tendrán que pasar muchos años para que se respete.

-¿Sería bueno para ese colectivo que hubiera un cambio en el Gobierno?

-Como colectivo nos interesa que haya un partido diferente al que tenemos ahora mismo, que sigue sin apoyar la cultura como debería hacer.

-Usted siempre ha estado muy vinculado al teatro. ¿También está saliendo de la crisis?

-La crisis grande más grande en el mundo de la interpretación está en el teatro. El cine y la TV están empujando para hacer cosas nuevas y de calidad, pero el teatro está un poco estancado y eso es una pena. 

-¿Cuáles son sus próximos proyectos?

-Tengo algún proyecto de una película, teatro como siempre, y espero enganchar alguna otra serie. Hice una en Francia que se llama 'Cannabis', que espero podamos hacer una segunda temporada.

-¿Se rueda en Francia igual que en España?

-No, allí hicimos una primera temporada de seis capítulos, con un solo director para todos ellos, la planificación estaba hecha desde mucho tiempo atrás y se va a un ritmo mucho más tranquilo, no hay tanta urgencia por sacar el producto. Esto último hace que se pueda trabajar con más profundidad, y por tanto con más calidad, sobre todo en el tema de los guiones, algo que aquí es la principal carencia por esa velocidad con que se trabaja, lo que hace que no estén lo suficientemente bien terminados.