Mourinho pone en marcha su maquinaria de censura en Manchester

El entrenador portugués ha conseguido que a la rueda de prensa previa a su enfrentamiento con Guardiola solo puedan acceder un número de periodistas muy limitado

Mourinho pone en marcha su maquinaria de censura en Manchester

Tras un año de triste transición en la Premier, donde todos los grandes sufrieron una crisis de identidad y el Leicester pudo ser campeón; el campeonato inglés vuelve a tener la enjundia de antaño. Las llegadas de Guardiola, Mourinho y Conte han rehabilitado a los mejores equipos del momento y en las tres primeras jornadas tanto City, como United y Chelsea cuentan todos sus partidos por victoria.

Por eso, casi nadie duda de que el triunfo final se lo llevara uno de estos tres conjuntos. Así las cosas, este sábado a las 13:30 se producirá el primer enfrentamiento directo en un derbi de Manchester entre Mourinho y Guardiola con Old Trafford como testigo. Este no será un partido cualquiera, ya que el portugués piensa que se juega gran parte de su futuro en la competición.

‘Mou’ había llegado al United con la intención de olvidarse de los líos del pasado. De hecho, encaró sus primeras semanas con una sonrisa en la boca y esforzándose para no entrar en ningún tipo de confrontación con los medios. Explotó su lado simpático mejor que nunca y algunos llegaron a decir que su nuevo puesto le había convertido en un hombre mucho más tranquilo en el trato con los jugadores y con todo lo que rodea al fútbol.

La expectación rompe todos los registros

No obstante, ante su primer partido de verdadera tensión, Mourinho ha decidido que lo mejor para contenerse y no soltar ninguna respuesta impertinente es controlar las preguntas que va a recibir. De esta forma, el club ha decidido que en la rueda de prensa previa al choque, que el técnico ofrecerá en la ciudad deportiva de Carrington, solo unos cuantos medios locales y nacionales tendrán acceso a la sala.

Con esta medida, Mourinho consigue que no haya ni un solo periodista de medios internacionales, con lo que evita que los españoles le recuerden las polémicas de los Clásicos del pasado. De hecho, no es la primera vez en esta temporada que ‘los Diablos Rojos’ vetan a algunos corresponsales. Asimismo, en este jornada se establece un máximo de un periodista por medio de cara a la conferencia de prensa.

Todo esto demuestra que Mourinho está muy tenso por lo que pueda suceder, ya que se ha generado una expectación desmesurada en torno a este encuentro. Sin ir más lejos, los precios por una entrada en la reventa ya rondan entre los 1.000 euros. Todo el mundo quiere volver a ver el saludo entre Mourinho y Guardiola, dos entrenadores con muchas cuentas pendientes, a pesar de que el catalán ha ganado más veces en sus enfrentamientos directos.